La ensalada de verano de pasta se ha convertido en una de las recetas favoritas para combatir el calor sin renunciar al sabor ni al placer de una comida completa. Ligera, fresca y muy versátil, esta ensalada combina la hidratación de los tomates cherry, la cremosidad del yogur y la mozzarella, el toque salado del jamón cocido y las aceitunas, y la energía de la pasta. Además, ¡se prepara en un abrir y cerrar de ojos!
Beneficios de esta ensalada
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Ligera y nutritiva: aporta carbohidratos de la pasta, proteínas de la mozzarella y el jamón, y grasas saludables de las aceitunas y la mahonesa.
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Fácil digestión: al servirse fría los sabores se funden sin resultar pesada.
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Versátil: perfecta para llevar a la playa, picnic o para meal prep de la semana.
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Bajo coste: ingredientes simples y de temporada.
Ingredientes (4 porciones)
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300 g de pasta (¼ de paquete estándar; ideal macarrones, farfalle o fusilli)
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Sal y pimienta al gusto
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Aceitunas al gusto (negras o verdes, según preferencia)
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Jamón cocido al gusto, en dados o tiras
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1 mozzarella (aprox. 125–150 g), escurrida y troceada
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Tomates cherry al gusto, partidos por la mitad
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125 g de yogur natural (1 unidad)
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1 cucharada de mahonesa
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1 cucharada de mostaza
Paso a paso
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Cocer la pasta
Cuece la pasta en abundante agua con sal. Sigue las indicaciones del paquete para que quede al dente.Consejo: agrega una cucharadita de aceite al agua para evitar que se pegue.
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Enfriar y escurrir
Una vez cocida, vierte la pasta en un colador y pásala bajo un chorro de agua fría hasta que deje de salir vapor. Esto detiene la cocción y garantiza una textura firme. -
Preparar la salsa cremosa
En un bol amplio mezcla el yogur, la mahonesa y la mostaza. Bate con unas varillas o un tenedor hasta integrar por completo. Ajusta de sal y añade una pizca de pimienta molida. -
Incorporar los ingredientes principales
Añade la pasta escurrida al bol con la salsa. Incorpora las aceitunas, el jamón cocido, la mozzarella y los tomates cherry. Remueve con suavidad para no romper los trozos de queso ni aplastar los tomates. -
Rectificar y macerar
Prueba y ajusta de sal y pimienta. Deja reposar en el frigorífico al menos 20 minutos: esto permite que los sabores se mezclen y la pasta absorba la cremosidad del aderezo. -
Servir
Decora con hojas de albahaca fresca o unas hojas de rúcula para un toque aromático. Sirve bien frío para máximo frescor.
Variantes y trucos
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Proteína vegana: sustituye el jamón por tofu ahumado o garbanzos cocidos; usa yogur vegetal.
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Toque cítrico: añade un chorrito de zumo de limón a la salsa para dar frescor extra.
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Crujiente: incorpora frutos secos picados (almendras tostadas o piñones).
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Picante: añade unas láminas de guindilla fresca o una punta de mostaza fuerte.
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Antigua versión italiana: cambia la mahonesa por pesto y prescinde de la mostaza.
¿Por qué triunfa esta receta?
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Rapidez: del agua hirviendo a la mesa en 20 minutos.
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Adaptabilidad: acepta infinidad de ingredientes según lo que tengas en la nevera.
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Frescura: ideal para el calor, sin encender el horno.
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Apuesta segura: gusta a niños y mayores por su combinación de texturas y sabores.
Con esta ensalada de verano de pasta, no solo tendrás un plato delicioso y saludable, sino también tu mejor aliado contra el calor. ¡Disfruta, experimenta con tus ingredientes favoritos y comparte tu versión en los comentarios del blog!
