Receta Saludable de Calabacín con Pollo y Queso: Sin Freír y Sin Bechamel
Si estás buscando una receta ligera, saludable y llena de sabor, ¡has llegado al lugar indicado! Esta receta de calabacín con pollo es perfecta para aquellos que desean una comida deliciosa sin la necesidad de freír ni usar bechamel. El calabacín es un ingrediente muy versátil, y combinado con el pollo y un toque de queso, se convierte en un plato exquisito y bajo en calorías.
Ingredientes:
- 2 calabacines
- 65 gramos de queso en polvo tipo parmesano (aproximadamente ½ taza)
- 1 pechuga de pollo
- 1 cebolla
- Sal, pimienta y orégano al gusto
- Queso rallado tipo mozzarella al gusto
Preparación:
Preparar el Calabacín : Lava bien los calabacines y córtalos en rodajas finas o en medias lunas. Estos se cocinarán rápido y le darán una textura suave al plato.
Cocinar el Pollo : Corta la pechuga de pollo en cubos pequeños y sazona con sal, pimienta y un poco de orégano. En una sartén antiadherente, dora los cubos de pollo hasta que estén bien cocidos. Retíralos y reserva.
Sofreír la Cebolla : En la misma sartén, añade un poco de agua (si deseas evitar cualquier tipo de aceite) y cocina la cebolla finamente picada hasta que se vuelva translúcida y fragante.
Unir Ingredientes : Agregue los calabacines y el pollo de nuevo a la sartén junto con la cebolla. Cocina a fuego medio, removiendo ocasionalmente hasta que el calabacín esté tierno pero no demasiado blando, para conservar su textura y nutrientes.
Añadir el queso : Espolvorea el queso parmesano y mezcla bien para que se funda ligeramente. Si te gusta, puedes agregar un poco de queso mozzarella rallado encima y cubrir la sartén unos minutos hasta que el queso se derrita.
Servir y Disfrutar : Rectifica la sazón y sirve este plato en caliente. ¡Es ideal como plato principal ligero o como acompañamiento de cualquier comida!
Este plato es una excelente opción para cuidar la salud sin sacrificar el sabor. Además de ser una receta fácil, es nutritiva, ya que el calabacín aporta fibra y vitaminas, y el pollo es una buena fuente de proteínas. El toque de queso le da una cremosidad perfecta sin necesidad de recurrir a la bechamel u otros ingredientes altos en calorías.
Conclusión
La combinación de calabacín y pollo con queso es un éxito seguro para quienes buscan una comida equilibrada y baja en grasas. Anímate a probar esta receta ya incluye más opciones saludables en tu dieta. ¡Tu cuerpo y tu paladar te lo agradecerán!